Viajar de mula para abastecer el creciente mercado subterráneo en la Isla no es legal. La Aduana cubana ha emprendido una intensa campaña contra quienes llevan productos para revender. Sin embargo, los cubanos viajan cada vez más a países como México, Panamá, Rusia o Guyana.
Según estadísticas reveladas a este diario por el Ministerio de Turismo de México, en el primer semestre de este año el número de cubanos que aterrizó en ese país creció en un 60,5% con respecto al primer semestre del año anterior. Hasta julio de este año se contabilizaron en los aeropuertos mexicanos 69.105 llegadas, 26.050 más que en igual período de 2017.
En 2016, hubo un pico de más de 100.000 entradas de cubanos por la crisis migratoria. Con el fin de la política de pies secos/pies mojados decretado por Estados Unidos a inicios de 2017 el flujo bajó pero se mantuvo por encima de los 83.000. Las compras la realizan al mayoreo para obtener ganancias. (MILENIO)
«Conseguir la visa mexicana es difícil», explica Juan Ernesto un cubano que viaja por negocios a Cancún. Entre los requisitos que impone el consulado de México en La Habana está disponer de una cuenta bancaria que demuestre solvencia económica, algún título de propiedad del interesado y y rellenar la solicitud de visa online.
«La mayor parte de las veces el sitio web donde se conciertan las citas no funciona. Las visas nuestras costaron alrededor de 500 dólares. La corrupción está a la orden del día tanto en México como en Cuba», agrega.
«En Cuba el Gobierno no se da cuenta de las oportunidades que está perdiendo. Persigue a los cuentapropistas y está empeñado en un modelo que no funciona. Cada uno de los cubanos que viaja a Cancún trae por lo menos 1.000 dólares para gastar aquí. Ese es un dinero que se pierden los negocios de la Isla», dice.
Con información de 14ymedio